Comparto con vosotros un texto publicado por Emma García en su blog coachemmagarcia.wordpress.com
El nuevo año nos regala 365 presentes
para disfrutarlos uno a uno. La única condición para poder aceptar tal
obsequio es la de recibir cada día tal y como venga, entendiendo que
el verdadero regalo no es lo que el día traiga consigo sino el
privilegio de vivirlo.
Cada
nuevo día es un nuevo presente, ese es el mayor don que nos da la
vida, independientemente de las circunstancias y acontecimientos que
con él devenguen. Goza de su novedad, no te aferres a lo que tuviste el
día anterior, porque en la vida todo es cambio.
Los
monjes budistas se preparan a lo largo de toda su vida para su gran
objetivo, alcanzar el nirvana. Para ello aprehenden de la sabiduría de
los maestros y de la práctica constante de las disciplinas milenarias
del yoga, para subyugar el cuerpo y la mente a la conciencia.
En nuestra cultura anhelamos y buscamos la felicidad
como si se tratara de un tesoro por desenterrar, algo a lo que sólo
unos pocos pueden acceder pues, o bien es la recompensa al éxito
profesional o bien al simple esfuerzo del trabajo duro, la austeridad y
el ahorro.
Pensamos
que tener más es ser más feliz, o incluso que necesitar menos ayuda a
encontrar la felicidad. Ambos extremos están ligados al concepto de que
la felicidad depende de algo externo a nosotros. Más riquezas, más
amigos, más ambiciones, más planes, más ahorro, más austeridad, más de
más…
Ya
sabemos que el dinero no da la felicidad pero ¿ayuda a conseguirla?
¿Nos preparamos conscientemente para encontrar y hallar la verdadera
felicidad? ¿Disponemos de un plan o programa personal para cultivar el
tan preciado arte de la felicidad?
Ciertamente
no, así que cada cual deberá descubrir sus propios secretos para ser
feliz. Por cierto, lograrlo resulta algo totalmente empírico, no vale
con el simple aprendizaje de algunas teorías o la lectura de cierta
literatura, es necesario también un proceso de interiorización y transformación que nos permita llevar a la práctica los métodos propuestos en nuestro propio plan para ser feliz.
Te
propongo algunas pautas para lograrlo, con dedicación y esmero puedes
conseguirlo a lo largo de este nuevo año que empieza. Adquirir un nuevo
hábito requiere de al menos 21 días seguidos de ponerlo en práctica.
Así que, tan solo dedica cada uno de los doce meses próximos a
desarrollar cada una de las siguientes habilidades, teniendo presente
cada día el propósito mensual, y para final de año te habrás
transformado en una persona renovada.
12 PAUTAS PARA SER FELIZ EN DOCE MESES
- Acepta las circunstancias de la vida tal y como son. Aceptación no es resignación, porque la aceptación requiere valentía y te vuelve protagonista de tu vida, mientras que la resignación de convierta en víctima de ella.
- Abre tu percepción a nuevas realidades. Fomenta tu creatividad, potencia tu curiosidad y asombro para aprender continuamente.
- Vacía tu mente de prejuicios inútiles y creencias limitadoras, y de todo aquello que la contamina.
- Elimina el rencor, es la carga más pesada que puedes portar. Aprende a pedir perdón y a perdonar, desbloquearás la energía que te permite sentir paz.
- Agradece cada día y pídele a la vida lo que necesitas. Focaliza tus energías en obtener aquello que deseas.
- Sé positiv@ de pensamiento, palabra, obra y acción.
- Conoce cómo piensas, cómo sientes y cómo reaccionas y actúas. La verdadera conquista es la de un@ mism@.
- Ama para comprender y compartir, y no para poseer ni exigir. Entiende que la compasión es algo más allá de la empatía.
- Reduce de tu vida los “debería”. Todo aquello que crees que debes hacer pero que no quieres hacer te desgasta y te aleja de lo verdaderamente importante para ti.
- Reconócete los pequeños logros de cada día, y premiate por ello haciendo cosas que te gusta hacer y te renuevan.
- Desarrolla tus cuatro inteligencias: mental, emocional, física y espiritual.
- Mantén la ilusión y las ganas de vivir
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